NUEVA SEDE DE PREZERO IBERIA: Calle Dédalo, 2 Madrid
NUEVA SEDE DE PREZERO IBERIA: Calle Dédalo, 2 Madrid
Sentarse un rato con Naiara para conversar es pasar lista a un montón de ideas con las que mejorar el bienestar y el compromiso de sus compañeros y compañeras. Merece la pena escuchar a esta joven alavesa de voz firme pero cercana para abrir los ojos a otras realidades. Gracias a los 15 años que lleva en el centro de Limpieza Viaria y Recogida de Residuos de Vitoria, podría presumir si quisiera de conocer la letra pequeña del día a día, esa que no viene en el contrato de adjudicación. Delegada del comité de empresa en representación de USO desde hace seis meses, detrás de esta operaria del turno de noche nos encontramos a una madre muy orgullosa de su hija de 9 años, gran lectora, aficionada al baile y, aunque lo diga con la boca pequeña, a las canciones de Raffaella Carrà ("Rumore, rumore…").
Empecé aquí en 2008 y hasta 2013 fui encadenando contratos eventuales. A partir de esa fecha, la empresa que entonces era adjudicataria me hizo indefinida a tiempo parcial y en 2020 a jornada completa. Ahora trabajo en el turno de noche para poder conciliar mejor con mi familia y como me saqué el carné de camión C1 puedo realizar las funciones de peón, peón conductor/a y conductor/a. Aunque si me das a elegir, prefiero conducir.
Eso es. En enero se hicieron elecciones sindicales y USO entró por primera vez en el comité de empresa con una única delegada que soy yo. Es un gran desafío para mí, pero soy muy optimista. Quiero trabajar para que este centro sea una referencia en la zona, que se escuche todavía más a los trabajadores y trabajadoras, que nuestras opiniones sumen y tengamos un mayor reconocimiento. Creo que la empresa ha entendido esta necesidad y estamos dando pasos en la dirección correcta.
Como pasa siempre antes de cualquier cambio, la llegada de PreZero generó incertidumbre entre la plantilla, pero esa fase ya pasó. Ahora estamos, entre todos, intentando dar la vuelta a la tortilla en muchos asuntos difíciles. Es el caso del absentismo, que sabemos que es muy alto. Para buscar una solución hemos creado un foro en el que tienen representación todas las partes, la social y la empresarial, donde podemos escucharnos unos a otros y buscar soluciones. No va a ser sencillo, no habrá resultados de un día para otro, pero queremos intentarlo.
Hay que mejorar la manera de escuchar al empleado. Darles reconocimiento en los pequeños detalles. Si algunos chubasqueros tienen problemas de impermeabilidad, traer otros nuevos. Si el asiento de un camión se estropea por el uso, ser más ágiles en la reparación. O si nos hemos quedado sin taquillas para todos, ofrecer alternativas. Sabemos que la empresa no lo tiene fácil, pero aumentar la preocupación por el bienestar de las personas trabajadoras, por ejemplo, con más concienciación sobre prevención o hábitos saludables, es una buena manera de alimentar el entendimiento y la colaboración. Es importante que la empresa dé pasos para promover este tipo de culturas en los centros de trabajo. Si eso pasa, los empleados y los sindicatos estaremos ahí para reforzar nuestro compromiso.
Hacer encuestas anónimas podría servir. También aprovechar aquellos momentos propicios para que se generen conversaciones. Por ejemplo, en Vitoria se ha puesto en marcha un proyecto para analizar nuestra manera de conducir. Si aceleramos de golpe, si giramos bruscamente de manera habitual, si gastamos mucho combustible… La comunicación de estos resultados supone un momento fantástico para generar una conversación con los empleados, ayudarles a mejorar o reforzar conductas positivas. Este tipo de diálogos elevan la motivación, favorecen un buen clima laboral y generan vínculos entre los equipos.
Sí, pero creo que aún quedan muchas cosas que hacer. El sector del medioambiente gusta y al final, si trabajas aquí, te acabas concienciando más o menos. Claro que sí. Aunque a veces pasa que los ciudadanos acuden a los operarios para saber cómo reciclar ciertos objetos y no obtienen la respuesta que esperaban. Lo básico lo sabemos todos, pero hay que saber contestar a los que nos preguntan para dar imagen y ejemplo.
La comunicación, la gestión del tiempo, la tolerancia al estrés o la capacidad para motivar a los demás son habilidades que tenemos las mujeres y que son muy preciadas en el sector. Esto, sin duda, representa una buena oportunidad para nuestro crecimiento profesional en estas empresas, por no hablar de que, cuanto más diversa es una plantilla, más puntos de vista entran en juego y mejor es la toma de decisiones.
Italia por la comida y la India para un retiro espiritual en la montaña, como en la película "Come, reza, ama". Pero mucho me temo que hasta que mi hija no se haga mayor me tocará esperar.
La carrera de Filología Hispánica. La dejé cuando nació mi hija. Solo me queda un año para terminarla y, por qué no, ser profesora de Lengua y Literatura.
Me gusta cocinar. Cuando me siento motivada soy de darme un homenaje y además soy súper fan de Master Chef. También bailo, pero ahora tengo un problema en la cadera y he tenido que dejarlo. Pero volveré.
Para bailar, música latina. Para escuchar, canciones de los ochenta de todo tipo.
Uuum, no te rías. Raffaella Carrà me divierte un montón.
Vivimos en una sociedad con mucho caos y mucho estés y hay que aprender a automotivarse. Buscar lo positivo, en el trabajo y en tu vida personal, es una válvula de escape para ser más feliz.
Una oportunidad a nivel personal y profesional para crecer como persona, como mujer y para trabajar por un futuro más limpio.