NUEVA SEDE DE PREZERO IBERIA: Calle Dédalo, 2 Madrid
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La economía circular pretende avanzar hacia un nuevo modelo de desarrollo y crecimiento en el que se optimice la utilización de los recursos, materias y productos disponibles; manteniendo su valor en el conjunto de la economía durante el mayor tiempo posible y en el que se maximicen los recursos que retornan al proceso productivo, y se reduzca al mínimo la generación de residuos. La sociedad evoluciona desde el tradicional modelo basado en producir, usar y tirar, hacia el nuevo paradigma de reducir, reusar y reciclar.
La economía circular quiere imitar a la naturaleza y crear ecosistemas locales. Ya sean naturales o antrópicos, convirtiendo los residuos en materias primas secundarias, gestionando eficientemente la energía y generando un cambio de paradigma. En este sentido, la economía circular se presenta como un sistema de aprovechamiento de recursos, lo que contribuye a la racionalización del uso de recursos naturales sin comprometer el futuro de las próximas generaciones. En Europa el porcentaje de reciclado y recuperación de residuos urbanos debería alcanzar en 2020 un 50% y crecer un 5% cada 5 años, hasta el 65% en 2035
La economía circular constituye una forma distinta de buscar soluciones para abordar los problemas a los que nos enfrentamos de escasez de recursos, generación de residuos y deterioro ambiental. Al mismo tiempo, proporciona vías para implantar estas soluciones en el desarrollo de nuestras actividades. Su alcance debe abordarse en el ámbito más amplio posible, desde la concepción y diseño de productos y servicios, hasta el final de la vida útil de los mismos. La economía circular se basa en los siguientes principios:
En PreZero, entendemos la economía circular como una fuente de generación de valor, tanto para transformar nuestras plantas de tratamiento de residuos en centros de recuperación de recursos y materias primas secundarias, como para crear nuevos modelos de negocio sustentados en la aplicación de los principios de la economía circular.
La experiencia de la compañía cubre todo el ciclo de vida de los residuos desde la recogida hasta el reciclaje, así como la transformación final de los residuos en materia o energía. PreZero ha desarrollado distintas soluciones que permiten el cierre del círculo para algunos materiales que, hasta ese momento, se consideraban residuos: convirtiendo esos residuos en recursos, o fabricando materias primas secundarias dando una segunda vida a los residuos que generamos.
Con el objetivo es alcanzar el máximo aprovechamiento del residuo trabajamos principalmente en dos ejes de actuación: materias y energía. Nuestro enfoque es la producción de nuevos materiales, o la generación de energía a través del residuo.
Las nuevas tecnologías juegan un papel determinante como elemento facilitador de la transformación hacia una economía circular. Para obtener materias primas secundarias que puedan competir con los materiales vírgenes, son necesarias tecnologías capaces de incrementar los actuales ratios de valorización material y especialmente su calidad, facilitando la recuperación de nuevos materiales que actualmente forman parte de los flujos de rechazo.
La gestión de los residuos evolucionará hasta convertirse en un proceso industrial, como cualquier otra industria 4.0. Gracias al uso de la analítica de datos (big data) y a la inteligencia artificial, las plantas de tratamiento serán operadas como fábricas inteligentes de producción de materias primas, permitiendo mejoras en las tasas de recuperación y en la calidad del material recuperado.
Desde PreZero llevamos a cabo un amplio programa de proyectos de innovación que utilizan nuevas tecnologías para incrementar la cantidad y la calidad de los materiales recuperados en nuestras plantas.
Esta tecnología nos permite mejorar las tasas de recuperación y la calidad del material, y también mejorar la eficiencia del proceso. Nuestras plantas de tratamiento de residuos se parecen cada día más a “fábricas inteligentes”, en las que los residuos son realmente una materia prima que se procesa para obtener unos materiales que pueden ser reintroducidos en el ciclo industrial. Un ejemplo es el proyecto ‘ZRR for Municipal Waste’, que analiza la aplicación de la tecnología robótica en la clasificación y selección de los residuos urbanos, actualmente instalado en la planta Ecoparc 4, situada en Hostalets de Pierola, Barcelona. Otro proyecto destacable es el desarrollado junto con la startup SADAKO que consiste en el uso de cámaras con inteligencia artificial para mejorar la clasificación de los residuos. Esta tecnología se ha implantado en plantas de España y Portugal.
El uso de drones equipados con distintos sensores, como los sistemas de visión o termográficos, e incorporando inteligencia artificial permiten mejorar la inspección, el mantenimiento de activos, la detección temprana de anomalías y la seguridad y salud en las instalaciones. Más de 12 casos de uso distintos han sido ya probados con éxito en nuestras instalaciones. En ellas han demostrado su versatilidad para monitorizar zonas de difícil acceso y, en este sentido, pueden ser de gran ayuda en aquellos espacios con atmósferas complejas, como los compost halls, donde el acceso humano está restringido.
La capacidad de reproducir entornos reales integrando el procesamiento de datos, los softwares inteligentes y los sensores permite predecir, controlar y producir en las plantas de tratamiento en función de estos datos. Además, genera valor en todo el ciclo de vida del tratamiento, desde el diseño hasta la operación. Esta tecnología ayuda a tomar decisiones y mitigar riesgos, convirtiéndose en una herramienta importante para la optimización de nuestros activos.
El uso de la realidad virtual aplicada al aprendizaje y la simulación en tareas de mantenimiento, reparación de averías o en simulación de situaciones de emergencia, es una herramienta de formación clave. Además, la realidad aumentada para la asistencia en tiempo real en actividades de consignación de maquinaría, como interface de gestión del mantenimiento y como sistema de mejora de las condiciones de autoprotección y seguridad de nuestros trabajadores. Ambas herramientas permiten mejorar significativamente la autoprotección y la seguridad laboral.
PreZero, como actor clave en la transición hacia un modelo de economía circular, mantiene colaboraciones con los distintos agentes que forman parte del círculo para asegurar el éxito de los proyectos. El modelo de la economía circular debe basarse en la colaboración público – privada: las administraciones públicas deben invertir para mejorar los porcentajes de recuperación; las empresas de gestión de residuos y los recicladores deben aportar know-how y capacidad de gestión; y los productores tienen que apostar por el uso de materiales recuperados en sus productos. Los ciudadanos tienen que separar en origen y apostar por productos y servicios más verdes.
PreZero busca los colaboradores externos necesarios para aportar el conocimiento científico y la tecnología necesarios para el desarrollo de los proyectos. Así mismo, participa en foros y grupos de trabajo, tanto a nivel español como europeo como la CEOE, Business Europe o el Grupo Español de Crecimiento Verde, para debatir las directrices sobre economía circular: estrategia de Plásticos, nuevas directivas de residuos, estrategia española de economía circular.