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28 OCTUBRE, 2025
PreZero ha participado en el V Foro Económico de Alicante, organizado por El Español – Invertia, para analizar el estado de la economía circular en una región que es pionera en gestión de residuos y donde el turismo puede ser una oportunidad también para el sector medioambiental.
El turismo es un motor económico clave en la Comunidad Valenciana, que, sin embargo, genera gran cantidad de residuos, por lo que es vital atajar el desperdicio alimentario y convertir ese residuo orgánico en recursos. “Esta comunidad es pionera y el residuo turístico es, de hecho, una oportunidad si se regula correctamente. Las plazas hoteleras, concentradoras de generación de residuos, son precisamente donde mejor se puede actuar para extraer la materia orgánica, transformándola en energía eléctrica o biometano,” explica Eduardo Azcona, director de Negocio Público Sureste de PreZero.
Región pionera, pero lejos de los objetivos europeos
PreZero gestiona aproximadamente el 50% de los municipios alicantinos en materia de recogida y limpieza diaria y el tratamiento de un 51% de los residuos. A estos municipios llegan las directrices europeas, plasmadas en la Ley de Residuos, que imponen objetivos muy concretos de segregación y recuperación, siendo la meta nacional conocida como la regla '65-25-10'. Esto implica que el 65% de los residuos debe reciclarse correctamente, mientras que la normativa marca que para 2035 solo el 10% de esos residuos debe acabar en un depósito controlado.
“Aunque Alicante se encuentra sustancialmente mejor que la media nacional en cifras de segregación, los datos de residuo en depósito controlado rondan el 50%. Para alcanzar los objetivos, necesariamente hay que realizar inversiones millonarias en infraestructuras de valorización energética,” apunta Eduardo Azcona.
Inversión y colaboración público-privada
PreZero estima que España necesita invertir 6.500 millones de euros en infraestructuras de gestión de residuos. En lo que a Alicante se refiere, algunas de estas instalaciones ya están en marcha, como los más de 30 millones de euros para la modernización y mejora de la planta de Piedra Negra en el término municipal de Xixona, que en este caso asume PreZero en el marco de la gestión de la red de ecoparques que hace para el Consorcio Terra.
Y otras aún pendientes, como la construcción de tres incineradoras que incluye el Plan Integral de Residuos que tiene pendiente de aprobación la Generalitat. Todas las nuevas infraestructuras requieren permisos dilatados y complejos permisos ambientales, por lo que Azcona hizo hincapié en la Ley de Simplificación Administrativa de la Comunidad Valenciana como un paso adelante para atraer estas inversiones.
Valorización energética y biometano
“Las tecnologías más prometedoras para la circularidad son la valorización energética, es decir, la incineración, que debe solucionar el reto del 35% de residuos que no pueden valorizarse como materia prima; y las plantas de biogás, que son esenciales para extraer el valor de la materia orgánica,” concluye Azcona.